Miedo a equivocarme, a no ser perfecta a fallar. Necesito pero no puedo, la presión me abruma y acaba apoderándose de mis pensamientos.

Sensaciones turbias, temblores y escalofríos.

Esa obligación de destacar. Lo correcto se adelanta y no deja paso, me encarcela en inseguridades sin silencio ni gritos, si piedad ni placer.

¿por qué no puedo escapar?

Nada me ata, pero no puedo irme, no puedo liberar mi mente, encarcelada sin retorno. Acaba ya, pero no acaba bien, estos pasos marcarán el camino, desconocido y deseado.

Frío ahogándose en llamas, locura, paz. Sensación de vacío en la abundacia, neciedad, claridad.
Saciedad en versos.
Deja escapar.
Atrás.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi corazón te espera

¿Inocentada o Inocente? Capítulo 18

El hombre que paseaba al perro.